Cómo lograr una buena convivencia en pareja

Por Dr. Marcelo Cubellun, Equipo de Bien Simple
Médico Psiquiatra

Existe una serie de comportamientos, actitudes o hábitos que obstaculizan la convivencia en pareja. Para que éstos no se conviertan en un problema para la relación, debes detectarlos y modificarlos.


1
Recuerda que los defectos del otro vienen junto con la persona. Si el amor te ha llevado a tomar la decisión de convivir con tu pareja, ten en cuenta que deberás aceptar que nadie es perfecto, lo que te incluye, y que aceptar los defectos del otro es un acto de amor. Si lo has elegido, en vez de quejarte, disfruta de compartir la vida con la persona que amas.
2
No lleves tus problemas laborales a casa. Suele ocurrir que los problemas laborales, económicos o cualesquiera sean, se acumulan al terminar el día y pueden tenerte de un humor insoportable. Procura, antes de entrar a casa, dejarlos a un lado, y en vez de generar un conflicto, aislarlos. Comparte una agradable cena con la persona que amas. Seguramente, descansado, al día siguiente, podrás encarar posibles soluciones.
3
Evita que se pierda el misterio y la seducción. Es cierto que al convivir, la vida que se llevaba anteriormente cambia. El dormir juntos suele postergar al sexo y a sus rodeos de seducción. En lugar de poner la pasión en el freezer, aprovecha que tienes todos los días para compartir y descubrir nuevas formas de placer. Tú eliges.
4
No invadas los espacios personales de tu pareja, ni permitas que anule los tuyos. Vivir juntos no tiene por qué ser sinónimo de hacer todo “juntos” o estar pegoteados. Respeta los espacios de tu pareja y promueve que respete los tuyos. Habrá momentos para todo, y cada uno podrá conservar su individualidad.
5
Evita el abuso de visitas. Si bien cada uno tiene sus amigos personales y familiares, ten en cuenta que la casa es de la pareja y debes respetarla. Suele ocurrir que alguno, o ambos, perciba que los suegros o amigos íntimos interfieren en la relación y que no pueden pasar el suficiente tiempo a solas. Antes de invitar a alguien, consulta con tu pareja y decídelo en forma conjunta.
6
No hurgues entre sus pertenencias. Si te acaece un ataque de celos y comienzas a revisar todas las pertenencias de tu pareja, sólo lograrás ver cosas donde no las hay, generando un conflicto innecesario. Recuerda que la confianza mutua es la clave para que una pareja crezca.
7
No pelees por dinero. No asumas una posición de tacañería o de malgasto del dinero. Insta a crear un fondo en común para los gastos comunes. Dialoga acerca de las preferencias del ahorro y procura que el manejo del dinero no sea un problema.
8
Evita que la responsabilidad del hogar recaiga en uno de los integrantes de la pareja. Las responsabilidades del hogar son uno de los núcleos de discusión más típicos en la pareja. Las tareas domésticas, las compras en el supermercado o el pago de los impuestos deberán tener un responsable (o dos) consensuado por ambos.
9
No faltes el respeto ni maltrates. Las discusiones y los intercambios de opiniones ocurren en todos los ámbitos de la vida, y la pareja no es la excepción. En una convivencia se juegan muchos sentimientos, buenos y malos, por lo que es necesario cuidarte y cuidar al otro de los malos tratos. Evita hablar cuando te percibas muy enfadado.
10
El amor no es eterno, se construye. Si bien el hecho de que hayas decidido ir a vivir con tu pareja es un gran paso para la relación, y seguramente es fruto de una decisión tomada a partir del amor que sientes, no olvides que el amor se construye en el día a día. Vivirlo implica seguir construyendo el cariño, el respeto y la sinceridad cotidiana.

Importante
• No existe ninguna fórmula mágica ni teoría científica respecto a las uniones duraderas. Permite que el amor guíe tu relación, y a partir de él, respeta las diferencias.

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